Inclusión en el Nivel Superior: Un camino abierto para más estudiantes

¿Cuántos estudiantes enfrentan barreras para graduarse? Desde la DESNU se trabaja en la articulación de acciones de inclusión real, como una de las claves en la educación superior.

La educación superior está en constante transformación por la necesidad de las soceidades de nuevos profesionales en diversos campos de conocimiento y, dentro de ese proceso, la inclusión juega un papel fundamental. En este contexto, la Línea de Trayectorias Estudiantiles de la Dirección de Educación Superior No Universitaria viene impulsando una articulación clave para garantizar el acceso y acompañamiento de más estudiantes en su formación profesional.

El equipo, trabaja desde el año pasado en relación a:

  • Problemáticas de estudiantes en el Nivel Superior No Universitario.
  • La accesibilidad de estudiantes con discapacidad en el Nivel Superior No Universitario.
  • Articulación con otras Direcciones y organismos.
  • Capacitación a docentes y estudiantes de técnicaturas y profesorados.

Este lunes, 26 de mayo, la referente de la línea, la Profesora en Pedagogía, Marcela Cruz, fue invitada para acompañar un momento histórico, en el marco de articulaciones con otros organismos: la graduación de Ignacio Castillo, un estudiante con discapacidad que se recibió como Técnico Universitario en Programación en la UTN. Este acontecimiento no solo representa el esfuerzo individual de Castillo, sino también un antecedente de gran valor para la mejora de los dispositivos de inclusión en el Nivel Superior.

Cruz, quien además desarrolla su tesis doctoral sobre inclusión en la educación superior, resaltó el impacto de este logro: «Este momento nos obliga a mirar el futuro con más compromiso. Es un precedente que nos motiva a seguir trabajando por una educación más accesible, con mejores dispositivos de acompañamiento, para que más personas con discapacidad logren alcanzar sus titulaciones y puedan ejercer su profesión con autonomía.»

Una historia de resiliencia y un nuevo sueño por cumplir

La historia de Ignacio Castillo es una muestra del impacto que la inclusión educativa puede tener en la vida de los estudiantes. «Nacho» tiene 22 años y es oriundo de Burruyacu y presenta una discapacidad motriz, retraso madurativo y de habla. Según relata su madre, Alejandra Cruzado, desde pequeño enfrentó múltiples desafíos: no caminó hasta los cinco años y tuvo dificultades para ingresar a la escuela. Sin embargo, gracias al apoyo recibido en su formación, Ignacio encontró en la tecnología y la programación una nueva vocación.

«Él quería ser militar», pero la programación le abrió otro camino. En la escuela tuvo contacto con computadoras, lo que despertó su interés en este campo. Hoy, al recibir su título, demuestra que la educación inclusiva es más que una política: es una oportunidad real de crecimiento, fueron parte de las reflexiones de su mamá. Nacho reconoció que fue un camino dificil, el cual quiso abandonar, sin embargo hubo una red de contención institucional, familiar y de profesionales de la salud que fue determinante.

La experiencia de Castillo también evidencia la importancia de contar con herramientas accesibles en la educación superior. Durante su trayectoria académica, pudo tomar exámenes con computadora, usar pendrives y contar con tutores que lo guiaron en el proceso. Estos dispositivos permitieron que Ignacio transitara su carrera con mayor autonomía y seguridad.

El compromiso de la educación superior con la inclusión

La Dirección de Educación Superior No Universitaria, a través de la Línea de Trayectorias Estudiantiles, trabaja en la construcción de experiencias que ayuden a mejorar el acompañamiento a los estudiantes con discapacidad. La meta es que cada vez más alumnos tengan las herramientas necesarias para acceder a una formación de calidad y obtener su titulación.

Este logro impulsa a las instituciones educativas a fortalecer los dispositivos de inclusión, promover políticas que garanticen el derecho a la educación y generar espacios donde cada estudiante pueda desarrollarse sin barreras. La historia de Ignacio Castillo es un símbolo de perseverancia, pero también una invitación a seguir trabajando por una educación superior donde la inclusión no sea la excepción, sino la regla.

Proyecto de Tutoría

Desde la Línea de Trayectorias Estudiantiles se desarrolló el Proyecto de Tutoría para visibilizar y dar respuestas a las distintas necesidades de los estudiantes. Aquí alcances de la línea, datos sobre los cuales se trabaja y proyecciones pensadas en la realidad actual de los institutos de enseñanza superior no universitarios de Tucumán: